Emily - 5ta parte [Segunda semana]

Jueves 13 de Agosto
Buscando a Katie



"Mi hermana se ha perdido." dije por enésima vez. "Ella es como yo." Señalaba mi cara. "¿La ha visto?"
Mierda, no sabía si lo decía bien, pero la gente parecía saber de que hablaba. La chica detrás de la caja se encogió de hombros. No, ella no la había visto, tampoco. Nadie la había visto. Ni siquiera sabía porque estaba preguntando en esa tienda, excepto porque estaba cerca de nuestro hotel. Los estantes lleno de ropa vintage que no eran el estilo de Katie.
Me di por vencida. Mi estómago hacia ruido con fuerza. "Disculpe." murmuré a un cliente mientras entraba a la tienda. Necesitaba algo para comer. Sentí que estaba a punto de desmayarme.
Caminé una calle hasta que encontré un tranquilo y pequeño café en la esquina. Empujé la puerta. Era pequeño, las paredes estaban decoradas con lienzos de arte contemporáneo, había plantas por todos lados, y una colección de mesas y sillas que no coincidían, almohadas de terciopelo se encontraban en un sofá de cuero viejo y había una antigua maquina de discos en el rincón. Genial. Me gustaba.
Una chica alta, que tenía puesto un vestido de cuero estaba haciendo café atrás del mostrador. Levantó la vista y me sonrió mientras yo miraba la variedad de pasteles que tenían en el bar.
"Buenos días.... ¿Qué tal?" me dijo la camarera, sonriendo. "¿Que deseas, querida?"
Le sonreí, me senté en un taburete contra la ventana. "Un pan de pasas y un café con leche." señalé a la parte de la pastelería. "Gracias."
Unas chicas estaban sentadas junto a mí en el bar, conversando profundamente. Mientras esperaba que me trajeran lo que había pedido, una de ellas levantó la cabeza y me miró de arriba abajo. Aparté la mirada de forma auto-consciente.
Cuando llego mi pedido, no podía comer tan rápido. Mastiqué lentamente, mirando hacia adelante. Una música jazz se escuchaba de fondo.
Tomé mi café, y luego me tiré hacia atrás. Una oleada de cansancio se apoderó de mí. Necesitaba más cafeína. No podía relajarme.
"¡Ok!" dijo la chica de al lado a su amiga en ingles. Ella tomó el dinero de su bolso y puso algunas monedas en el mostrador. "No hay nada más que decir. No puedo hacer esto ahora..." Recogió su bolso y saltó del taburete.
"Sara, espera." dijo su amiga, "Llámame..." pero la chica ya estaba afuera.
Rápidamente miré hacia la máquina de café.
"Por favor, otro..." y señalé mi café.
"Si." dijo ella amablemente. "¿Eres inglesa?"
Asentí con la cabeza. "¿Es tan obvio?"
La chica que estaba a mi lado giró el taburete. "Sabes, tu francés es realmente bueno." dijo ella. "Al menos lo intentas."
Ella intercambio una mirada extraña con la camarera, quien empezó a hacer mi café.
"Así que...", dijo la chica. "Mi nombre es Anna."
"Emily." nos dimos la mano con torpeza.
"¿Estas de vacaciones?" ella era unos años mayor que yo, con el pelo rubio oscuro, como una especie de estrella de una película de los años 40, con su inmaculado lápiz labial rojo.
"Solo, unos días en Paris..." dije. "En realidad estoy buscando a mi hermana... Desapareció ayer por la noche."
Sus ojos se abrieron. "Oh no." dijo ella preocupada. "¿Tienes una foto? Tal vez la he visto en alguna parte."
Negué con la cabeza. "No tengo una foto, pero ella es mi gemela. Se parece a mí."
Ana se inclino hacia adelante y examino mi cara. "No." dijo gentilmente después de un minuto. "No he visto a nadie como tú. Lo siento."
Habló en francés con la camarera, que había colocado una segunda taza de café frente a mí y limpiaba las mesas.
Anna se volvió hacia mí. "Bene dice que vio a una chica que tenía el pelo como el tuyo, con la piel pálida, alrededor de las 2 de la mañana anoche. Estaba oscuro, pero ella tenía un pequeño bolsito ¿Y una minifalda?"
"¡Esa es ella!" dije excitada. "¿Donde estaba?"
"Cerca de Rie Cavere." dijo Bene, que seguía limpiando. "Ella estaba un poco molesta. Mis amigos y yo estábamos a punto de ir a preguntarle si se encontraba bien, pero ella se fue corriendo."
Pobre Katie. Cerré los ojos. Le dije que se fuera a la mierda, y así lo hizo.
Anna vio mi cara. "Mira, puedo preguntar todo el día por los alrededores." dijo ella "Tal vez alguien ha visto a tu hermana" ella acaricio mi rodilla. "Alguien tan bonita como eres tú.... Ellos tienen que haberla visto."
De todos los bares en el mundo.
"Gracias, eso es mi amable."
"De nada, no es nada. Estoy encantada de ayudarte."
La observaba, mientras ella se ponía lápiz labial. "La de antes ¿Era tu novia?"
Anna guardó su lápiz de labios. "Mi ex-novia." dijo encogiéndose de hombros. "Como te habrás dado cuenta."
Ella suspiró.
"Oh...esas jodidas relaciones. Me están arruinando."
Reí. "Se a lo que te refieres."
"¿Tienes novia?" Anna se apresuro a decir, por casualidad.
"Yo... Sí, soy reciente." Yo estaba ruborizada. "Ella está en Inglaterra."
"Una chica con suerte. Escucha." apartó las notas de Bene. "Tengo un par de horas libres de trabajo hoy. Puedo llevarte a algunos lugares... donde tu hermana podría estar"
Dudé. "¿Estás segura? Eso sería genial."
"Por supuesto. Cuando hayas terminado tu bebida, te ayudaré." ella sonrió "No hay ningún problema."
Diez minutos más tarde, Anna y yo nos dirigíamos a su barrio.
"Vamos a empezar con los cafés y bares de aquí." dijo enérgicamente.
Y caminamos kilómetros, Anna disparaba su francés a todos los que conocimos y en cuestión de segundos seguíamos caminando.
Nadie había visto a Katie. Sentía que el miedo se apoderaba de mí. Eso me ponía de mal humor. Debía parecer preocupada, porque Ana pasó su brazo a mí alrededor.
"No te rindas" dijo. "París es más grande de lo que piensas. Vamos a parar y a hacer otro plan." estábamos frente a un edificio con ventanas pintadas de negro y oro.
"Este es mi café favorito de 3W." hizo una pausa. "Significa Mujer con mujer. Paremos a tomar una copa"
Me sentí incómoda. "Gracias, pero tengo que seguir buscando a mi hermana."
Anna suspiró. Alargó su mano y me acarició la mejilla. "Entiendo. Pero aun así me gustaría seguir ayudándote. Te veo tan sola." Ella sacó algo de su bolso. "Aquí tienes." Me entregó una tarjeta con su nombre y su teléfono móvil con tinta púrpura en relieve. "Si cambias de opinión voy a estar aquí esta noche. Desde las nueve."
"Gracias." Dudaba de si volvería a verla. Aparte del hecho de que mi hermana estaba en algún lugar en París, haciendo Dios sabe qué, había algo en Anna que me hacía sentir incomoda. "Voy a ver que hago."
Dejé a Anna y encontré el camino de vuelta al hotel. Eran las tres de la tarde y Katie no aparecía.
Está bien. Me dije. Ella volverá. Tiene que volver.